Control de infecciones para la atención a largo plazo

En las residencias de atención a largo plazo, es importante limitar las transmisiones de infecciones. En los artículos a continuación, puede obtener más información sobre cómo identificar y evitar las situaciones de riesgo.

Sabemos que los ancianos, los enfermos crónicos y ciertos grupos de riesgo son más susceptibles a las infecciones y se recuperan más lentamente. En las personas con edad avanzada, el sistema inmunológico puede estar debilitado, por lo que el riesgo de complicaciones y enfermedades a causa de estas es mayor. Cuando las personas conviven en estrecha cercanía y pasan tiempo juntas en áreas comunes, que suele ser el caso de una residencia de ancianos, el riesgo de transmisión es alto.

Dado que es más fácil que las infecciones se propaguen de persona a persona en los entornos de atención a largo plazo, es muy importante identificar las situaciones en las que hay riesgo de contaminación cruzada. Al identificar las situaciones de riesgo, podemos gestionar e implementar estrategias para una buena higiene de manos a fin de reducir el riesgo de infección. En un centro de atención a largo plazo, hay muchos grupos objetivo que deben recibir información sobre cómo llevar a cabo una buena higiene de manos. Tanto los residentes como los profesionales sanitarios y los visitantes tienen un rol a la hora de garantizar la seguridad de la atención a largo plazo.

Descubra más sobre el control de infecciones para centros de atención a largo plazo con los cuatro momentos de la higiene de manos de la OMS.

Una vida más larga

Debido a la mayor esperanza de vida, en la dinámica social y el desarrollo de la atención de rehabilitación, ha incrementado el número de personas, en particular, los ancianos, que reciben atención en centros de atención a largo plazo y residencias de ancianos, especialmente en los países con altos ingresos.

Riesgo más alto

Los ancianos tienen un mayor riesgo de infección en comparación con los adultos más jóvenes; con un mayor riesgo de neumonía e infección del tracto urinario (ITU). En promedio, las personas en residencias de atención a largo plazo desarrollan de una a tres infecciones por año, principalmente neumonía e ITU.

Control de infecciones para centros de atención a largo plazo: los cuatro momentos de la higiene de manos de la OMS

Las infecciones en los residentes de centros de atención a largo plazo son comunes, costosas y conllevan importantes tasas de mortalidad. En el caso del cuidado de ancianos, la transmisión de infecciones provoca muchos problemas. Muchos residentes son especialmente vulnerables debido a disfunciones inmunológicas y otras limitaciones relacionadas con el envejecimiento.

En la atención a largo plazo, el riesgo de transmisión de infecciones o microorganismos también es alto. Esto se debe a varios motivos, entre ellos, el entorno abierto con muchos puntos de contacto entre los cuidadores, visitantes y residentes. Esto significa que las precauciones que se toman en los centros de atención suelen depender en gran medida en las iniciativas individuales y del conocimiento del personal.

Para evitar los daños tanto físicos como económicos que las transmisiones de infecciones pueden provocar en su residencia de atención a largo plazo, es importante limitar la propagación. Una higiene de manos correcta es el paso más importante en la prevención de infecciones en la atención a largo plazo. La OMS ha creado un método de aplicar cuatro momentos de la higiene de manos para la atención sanitaria en los hogares residenciales: Lávese las manos 1) antes de tocar al residente, 2) inmediatamente antes de realizar un procedimiento limpio/aséptico, 3) inmediatamente después de una tarea que implique riesgo de exposición a fluidos corporales y 4) después de tocar al residente o cuando se interrumpa el encuentro.

Al educar a los visitantes y al personal por igual, así como al hacer más accesibles el jabón y el agua o los desinfectantes, ayudará a garantizar una buena higiene de manos y, por lo tanto, a reducir el riesgo de propagación de infecciones en los centro de atención a largo plazo.

Sabemos que cuidar a los ancianos significa también atender su bienestar y prestar atención a sus necesidades específicas en cuanto al cuidado de la piel. Si bien los productos desinfectantes son eficientes, disponer de jabones suaves, cremas para manos y otros productos adaptados para la piel sensible, es una buena medida y una gran demostración que se preocupa por los residentes ancianos.

¿Está listo para tomar medidas para mejorar la higiene de manos en su centro de atención a largo plazo? Solicite que uno de los miembros de nuestro equipo se comunique con usted.

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